Los Derechos de Autor en un mundo de zurdos culturales

El debate sobre los derechos de autor, seamos conscientes, lo acabarán ganando los que más dinero tienen, es triste pero cierto: acabarán quitándonos el derecho a la copia privada.

Ahora cuando los e-books se extiendan no tendremos derecho (y con los DRM ni siquiera la posibilidad) de prestar un libro a un amigo, con los videojuegos cada vez más gracias a plataformas como Steam no tenemos posibilidad de prestárselo a un amigo sin decirle cuál es nuestra contraseña, algo que no sé hasta qué punto vulnera nuestros derechos. Cuando compramos una copia de Windows, es para un sólo ordenador. Las licencias de software nos obligan pagar una y otra vez por lo mismo, porque parece ser amoral que si tengo dos ordenadores me compre un sólo Windows para instalárselo a los dos, parece ser que lo más ético es comprarse dos veces el mismo producto, no vaya a ser que se lo prestemos a un amigo y le ahorremos unas pelillas ahora en estos tiempos de crisis.

Para mí uno de los puntos que ha alcanzado mayor ridiculez es el canon a bibliotecas. Se supone por normativa europea que todas las bibliotecas han de pagar un canon de 20cts por cada obra prestada, para compensar las posibles pérdidas que conlleve el que la gente pueda obtener gratuitamente un libro, un cd o una película. ¿No os parece indignante? Las bibliotecas no tienen ningún tipo de ánimo de lucro, son uno de los pocos abrevaderos de cultura gratuita que existen, y parece que algo tan antiguo e importante les duele la vista al lobby de creadores porque no puede ser que alguien sólo por ser ciudadano pueda ir a un edificio y pedir libros prestados. Quienes dictaran tal normativa (creo que no fue la SGAE) parece que pensaran que es amoral y antiético que el pueblo disponga de un libro gratuitamente o que 20cts por libro no es tanto. Afortunadamente, en España las bibliotecas se están negando a pagar este canon, porque obviamente no tienen ningún tipo de ánimo de lucro.

Yo siempre lo pienso, probablemente cuando sea viejo y le diga a mis nietos que cuando yo era joven nos podíamos descargar gratuitamente música, pelis y libros por el ordenador, me mirarán con los mismos ojos llenos de fascinación que cuando les diga que el primer móvil que tuve no era ni táctil y ni siquiera a color o que internet nos bajaba a 5kB/s.